Cuando se trata de niños, hay una gran diferencia entre la intimidación y el conflicto infantil normal. El bullying o acoso escolar es una forma de agresión en la que un niño trata de forma deliberada y repetida de dañar a otro niño. Puede adoptar muchas formas, desde la violencia física hasta el acoso verbal y la exclusión social.

El conflicto infantil normal, por otro lado, es parte del crecimiento y generalmente involucra a dos niños que intentan resolver sus diferencias.

¿Cuándo las burlas infantiles cruzan la línea y se convierten en acoso escolar?

La mayoría de los niños experimentarán algún tipo de burla o intimidación en algún momento de su infancia. Si bien puede ser una parte normal del crecimiento, existe una línea muy fina entre las burlas inofensivas y la intimidación.

Es importante saber la diferencia entre el acoso y las bromas.

Hay varias diferencias clave entre la intimidación y el conflicto infantil normal.

• El acoso implica un desequilibrio de poder, en el que el acosador utiliza su tamaño, fuerza o popularidad para controlar a la víctima.
• El acoso se repite con el tiempo, mientras que los conflictos normales se resuelven rápidamente.
• La intimidación es intencional; el acosador sabe que él o ella está lastimando a la víctima.
• Las víctimas de la intimidación a menudo se sienten asustadas o impotentes, mientras que las personas involucradas en un conflicto normal generalmente no lo sienten.

Si no estás seguro de si tu hijo está siendo acosado o simplemente está siendo objeto de burlas, busca estas señales reveladoras:

- ¿Se repite la conducta?

- ¿Hay intención de hacer daño?

- ¿El niño está siendo aislado o excluido?

- ¿Tiene el niño miedo de ir al colegio o a otras actividades?

Si notas alguno de estos comportamientos, es importante que hables con tu hijo y veas qué está pasando. Es posible que dude en abrirse al principio, pero hacerle saber que estás ahí puede marcar una gran diferencia.

¿Cuáles son las consecuencias del bullying?

El acoso escolar puede tener graves consecuencias tanto para la víctima como para el agresor:

• Los niños que son acosados pueden sufrir de baja autoestima, ansiedad y depresión. También es más probable que se involucren en el abuso de sustancias y que intenten o se suiciden.

• Los agresores corren el riesgo de tener problemas como el abuso de drogas y alcohol, dificultades académicas y violencia. También es más probable que crezcan y se conviertan en adultos abusivos.

Cómo prevenir el acoso en el Colegio

Para prevenir la intimidación hay que comenzar por HABLAR DE ELLO, es importante que los niños sepan qué es el bullying y cómo identificarlo.

Los niños tienen que saber que el acoso no está bien y que pueden decirle a un adulto si les está pasando a ellos. Es importante educar a los estudiantes sobre qué es el acoso escolar y cómo puede afectar a los demás. Discutir estos temas abiertamente puede ayudar a los alumnos a comprender por qué la intimidación es mala y cómo pueden enfrentarla si ven que sucede.

Necesitamos crear un ambiente seguro en el colegio donde los niños sientan que pueden hablar sin temor a represalias. Esto significa crear un espacio donde sientan que pueden expresarse abiertamente sin juicios ni preocupaciones.

Una forma de hacerlo es estableciendo políticas claras contra el acoso escolar y asegurándose de que todos en la comunidad escolar estén al tanto de ellas. El Colegio también debe ser proactivo al abordar cualquier incidente que ocurra, para que los niños sepan que serán tomados en serio y apoyados.

En la prevención del acoso escolar la Enfermera Escolar ayuda a crear un ambiente seguro y de apoyo para todos los estudiantes. Al trabajar con profesores, orientadores y otros miembros del personal, la enfermera escolar puede ayudar a identificar y abordar posibles situaciones de intimidación antes de que se intensifiquen.

El objetivo en el colegio es detener el acoso antes de que comience y tomar medidas desde el principio.